Las empresas familiares han demostrado ser pilares fundamentales de la economía global, combinando tradición, resiliencia e innovación.
Sin embargo, uno de sus mayores desafíos sigue siendo la transición generacional. A pesar del compromiso de las nuevas generaciones con el negocio familiar, cada vez es más común que no aspiren a asumir roles de liderazgo. La estabilidad financiera, el crecimiento profesional y el reconocimiento parecen pesar más que la dirección de la empresa.
Según estudios recientes, solo un reducido porcentaje de jóvenes aspira a asumir roles de liderazgo empresarial en el futuro, una tendencia que también se refleja en las nuevas generaciones de la empresa familiar. En su lugar, sus prioridades se enfocan en:
- Conseguir estabilidad financiera y bienestar personal (55%).
- Seguir formándose y adquiriendo nuevas competencias (30%).
- Obtener reconocimiento por su trabajo y trayectoria (32%).
Esto plantea un interrogante para los actuales líderes: ¿cómo asegurar la continuidad de la empresa familiar si las nuevas generaciones no muestran interés en dirigirla?
La respuesta, según el informe global de KPMG y STEP Project Global Consortium, está en transformar la forma en que se entiende el liderazgo dentro de la empresa familiar. No se trata solo de heredar el mando, sino de redefinir la dirección del negocio para integrar las expectativas y valores de las nuevas generaciones.
De la tradición a la innovación: redefiniendo el liderazgo en la empresa familiar
El informe de KPMG subraya que las empresas familiares más exitosas son aquellas que logran equilibrar su legado con la innovación.
Las nuevas generaciones valoran aspectos como la flexibilidad, la sostenibilidad y el bienestar personal, por lo que es fundamental que la empresa evolucione hacia un liderazgo más colaborativo, diverso y adaptado a sus expectativas.
Un aspecto clave en esta transformación es el aprendizaje continuo.
A pesar de no querer asumir los desafíos de una dirección tradicional, los jóvenes de empresa familiar sí están comprometidos con su desarrollo profesional. Los datos reflejan que sus principales áreas de interés son:
- Digitalización e inteligencia artificial: Un 45% considera esenciales las competencias en nuevas tecnologías para el futuro del negocio.
- Formación en idiomas: Un 34% reconoce la importancia de los idiomas para la internacionalización de la empresa familiar.
- Crecimiento en soft skills: Las habilidades de comunicación, liderazgo en red y gestión del cambio son cada vez más valoradas en la gestión empresarial moderna.
El nuevo liderazgo en la empresa familiar no tiene que pasar únicamente por ocupar el cargo de director general o CEO, sino por asumir roles estratégicos en áreas clave como innovación, expansión internacional o transformación digital.
La continuidad del negocio familiar
Para las generaciones actuales de líderes, el desafío es claro: en lugar de forzar a los jóvenes a encajar en modelos de liderazgo tradicionales, deben encontrar nuevas formas de involucrarlos en la empresa. Algunas estrategias clave incluyen:
- Fomentar un liderazgo flexible y adaptativo, donde diferentes miembros de la familia puedan asumir responsabilidades estratégicas sin necesidad de ejercer un control absoluto sobre la empresa.
- Crear estructuras de participación atractivas, que permitan a los jóvenes contribuir al negocio sin renunciar a su estilo de vida y aspiraciones personales.
- Invertir en formación y acompañamiento, para que las nuevas generaciones se sientan preparadas y confiadas en su capacidad de aportar valor.
- Integrar valores de sostenibilidad e impacto social, ya que muchas empresas familiares con visión de largo plazo están adoptando modelos más responsables y alineados con las prioridades de las nuevas generaciones.
El liderazgo en la empresa familiar está evolucionando.
La continuidad ya no trata solo de dirigir, significa construir un proyecto que siga aportando valor generación tras generación.
Las empresas que logren redefinir sus estructuras y adaptarse a las expectativas de los futuros líderes estarán mejor posicionadas para afrontar los retos del futuro.
Las nuevas generaciones no rechazan la empresa familiar: quieren cambiar un liderazgo jerárquico y obsoleto por uno más colaborativo, innovador y sostenible.
¿Cómo está afrontando tu empresa familiar este desafío?
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Fuentes: MuyPymes KPMG