Ya os contábamos en este post cuáles eran los 4 pilares fundamentales de la empresa familiar:
- La familia y las personas.
- La empresa y sus negocios.
- El patrimonio y la propiedad.
- El liderazgo y la iniciativa.
Hoy queremos hablaros sobre el primer pilar, la familia: las personas que la componen y las personas que aún sin ser de la familia están involucradas en la PYME Familiar son sin duda su activo más importante.
El comportamiento, la actitud, la capacidad, el compromiso, la educación, la formación, la experiencia de cada uno de sus miembros es lo que va a condicionar en mayor medida cual será el devenir de la empresa familiar y de la propia familia.
Podemos trabajar en profundidad los aspectos básicos y técnicos de la empresa, del patrimonio y de la iniciativa, tener estrategias y planes; si las personas no están alineadas o su actitud o su formación no son las adecuadas, la PYME Familiar sufrirá bloqueos o conflictos de todo tipo que la alejarán de conseguir cualquier objetivo.
En la PYME Familiar, en general, las emociones están más presentes y tienen mayor trascendencia que en otro tipo de organizaciones. El contacto continuo dentro y fuera de la empresa, las relaciones y vínculos afectivos hacen que los conflictos puedan tomar dimensiones más allá de lo racional. Estas son realidades que hay que cuidar consiguiendo unas relaciones muy sanas en el día a día y teniendo válvulas de escape adecuadas desde las que tratar los conflictos en su estado más incipiente. Las personas de máxima responsabilidad deben poder trabajar con libertad y claridad, sin miedos ni presiones, pues sobre ellos recae el peso del futuro de la organización.
Debe existir una reflexión personal profunda de cada miembro de la familia sobre el compromiso individual adquirido con el grupo y con el proyecto global de PYME Familiar, y al mismo tiempo poder definir metas y objetivos particulares sin que por ello se rompa la armonía y la fortaleza del grupo. Es necesario trabajar el equilibrio emocional de las personas, potenciando su capacidad de auto-motivación y auto-control, mejorando su rendimiento, lo que se traducirá en el desarrollo de todo su potencial, elevando sus habilidades y competencias personales, relacionales y organizacionales.
Por todo ello, desde este primer pilar nos proponemos ayudar a las personas que conforman las PYMES Familiares de nuestro entorno a:
- Desarrollar su auto-conocimiento y su aprendizaje personal.
- Descubrir e impulsar capacidades y habilidades potenciales.
- Facilitar las relaciones entre los miembros del grupo y la resolución de conflictos.
- Resolver asuntos personales que podrían afectar al desempeño de su trabajo y al clima laboral o familiar.
- Marcar planes de acción para llegar a la situación Ideal Personal y Profesional.
- Contribuir a la armonía del grupo y mejorar su calidad de vida.
