El pasado 16 de noviembre impartimos en las instalaciones de Epyme la conferencia Retos de la PYME Familiar en la cual desmenuzamos los desafíos a los que las PYMES familiares se enfrentan en su día a día y de cara al futuro.
Nuestro objetivo durante estas dos horas fue concretar y encuadrar estos retos dentro un marco apropiado, para que los asistentes pudieran situarse y “otear el territorio que pisan” con perspectiva, profundidad, y conocimiento. En definitiva, se repasaron, de una manera eminentemente práctica, las claves para poder anticiparnos y enfocar el trabajo a desarrollar como familias empresarias.
Anticipacion, adaptacion, accion, claves de la empresa familiar #pyme @japonmatari
— Diana García Ortega (@diana_naif) 16 de noviembre de 2016
Francisco Palma y Luis Borrajo, Director y Director Financiero de JAPÓN MATARÍ, S.L., fueron los encargados de dar estas claves que permiten interpretar la situación y comprenderla mejor.
¿Cómo afrontar las necesidades y problemas de nuestra pyme familiar?
Francisco Palma comenzaba su ponencia invitando a los asistentes a pensar en aquellos aspectos que más preocupan a los empresarios familiares y compartió con ellos un breve test que permitió a los asistentes tomar conciencia de la situación de su PYME Familiar conforme avanzaba la jornada.
La familia Libre en el curso para empresas familiares impartido en #Epyme por @japonmatari sacando conclusiones para abordar y mejorar pic.twitter.com/ZC8NuutDS0
— Cervezas Libre (@CervezasLibre) 16 de noviembre de 2016
Francisco planteaba diferentes enfoques orientativos desde los que partir.
En primer lugar, un enfoque estático reflexionando sobre la situación familiar, del negocio, del patrimonio y la iniciativa, se trata de acercarse a una realidad compleja desmenuzándola en partes más asequibles.
En el segundo análisis que propuso, el foco se centró en la realidad del negocio, el día a día sobre las preocupaciones de un gerente, ¿Tenemos demanda para nuestros productos/servicio? ¿Somos capaces de captar esta demanda?, ¿Tenemos la estructura adecuada para satisfacerla? ¿Qué capacidad de inversión poseemos? Y las personas de mi equipo, ¿son las adecuadas? ¿Sé cómo dirigirlas? ¿Cómo gobernamos?… Preguntas que todos nos hacemos pero que cuando aplicamos rigor nos ayudan a mostrar esos cuellos de botella que existen en todas las empresas impidiendo que obtengamos los rendimientos adecuados.
Un tercer enfoque ponía énfasis en el propio modelo de gobierno de la PYME familiar y su evolución a lo largo de las generaciones: De la Empresa de Trabajo Familiar, a la Empresa de Gobierno Familiar pasando por la Empresa de Dirección Familiar. Cada una de estas fases implica un trabajo diferente que hay que verificar para abordar la siguiente etapa.
Las 4 crisis de la Empresa Familiar
Tomamos conciencia de las crisis de madurez por la que toda PYME familiar sí o sí va a pasar más tarde o más temprano:
- La de maduración del negocio y la necesidad de tener planes de renovación y adaptación a las necesidades del mercado.
- La inflación de puestos familiares, especialmente cuando la preparación y formación de éstos no es la adecuada.
- La “caducidad” del líder. Nadie es eterno, y hay que trabajar a conciencia en el relevo.
- El conflicto de intereses y lealtades que se producen cuando no se trabajan los objetivos comunes.
Por último repasó con todos nosotros las grandes trampas de las empresas familiares, y que se resumen en una: Creernos que somos inmunes y que todo esto no va con nosotros.
Por ello Francisco nos animaba a reflexionar y acabar tomando dos decisiones determinantes:
- Formarse. Es necesario conocer lo que se tiene entre manos. La realidad de la PYME Familiar es compleja y precisa de profesionales adecuadamente preparados.
- Dejarse ayudar. Dejar pasar el tiempo, creerse capacitado para afrontar en solitario estos retos o erigirse en juez y parte son errores que acaban pagándose muy caro. Es necesario encontrar el apoyo adecuado y ser permeable a enfoques de profesionales y expertos.
La ayuda externa de profesionales adecuados es primordial en la PYME familiar.
El buen asesor debe ser depositario y generador de confianza, aportar el punto de vista objetivo y neutral, desde la experiencia propia y acumulada para conseguir diseñar planes y propuestas de futuro que sean aceptados por todos los miembros.
El empresario familiar tiene que saber de su negocio, manejarlo y enfocarse en el éxito, pero no tiene por qué saber de sucesión, órganos de gobierno familiares y empresariales, psicología o gestión patrimonial. Puede y debe confiar en expertos y emplear su energía en fortalecer su empresa.
El control económico en la Empresa Familiar
Por su parte, Luis Borrajo comenzó su ponencia, sobre la importancia de definir y medir un control económico y financiero para poder mejorar, con esta frase:
“Lo que no se define no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar. Lo que no se mejora, se degrada siempre”, Lord Kelvin (físico matemático).
Luis nos hizo reflexionar sobre 3 errores importantes en la gestión de empresas familiares:
- Considerar la contabilidad y la actividad de administración son un fin en sí mismo.
- La ausencia de control como herramienta al servicio de la gestión y la toma de decisiones.
- La inacción, la peor de las alternativas.
En Japón Matarí tenemos una experiencia acumulada de más de 40 años, lo que nos permite afrontar los retos de la Familia Empresaria comprendiendo las distintas realidades que se conjugan para aportar soluciones de éxito a largo plazo.
Agradecemos una vez más a los asistentes y también al equipo de Epyme por su colaboración para hacer posible la celebración del encuentro.
Si no pudiste asistir, ¡iremos informando de las próximas jornadas de formación en nuestra web y redes sociales!
