Las empresas familiares han sabido sobrellevar todos los problemas que ha traído con ella una pandemia sin precedentes como ha sido la del COVID-19, la cual ha llevado al límite las capacidades de las familias empresariales para adaptarse al cambio, y ser resilientes a través de las generaciones.

Sabemos, que las empresas familiares contribuyen de manera muy significativa tanto al crecimiento económico como al empleo, con un enfoque a largo plazo, que ha contribuido ampliamente en la pandemia, a pesar de los extraordinarios problemas de liquidez que han tenido las compañías.

Pero si las empresas familiares quieren mantener su legado y tener una trayectoria a largo plazo, el momento de actuar es ahora. Es el momento de implantar nuevos pilares sobre los que sustentar sus estrategias, adaptarse a cambios y seguir adelante. Aunque la mayoría de las empresas encuestadas en la Encuesta Mundial de la Empresa Familiar, creen que en el año 2022 volverán a los índices de crecimiento en los que se encontraban en 2019.

La pandemia ha sido capaz, entre otras muchas cosas, de eliminar cualquier duda sobre los beneficios de la transformación digital en las empresas. Así, aquellas compañías con mejores capacidades digitales, han sido aquellas que han sabido sobrellevar la crisis, aunque queda mucho trabajo por hacer, ya que estos comercios han sido la minoría.

En la EMEF sólo el 19% de las empresas familiares puede confirmar que su viaje hacia la transformación digital está completo, creyendo el 29% de los encuestados que, a pesar de saber que no cuentan con grandes capacidades digitales, creen que éstas no ocupan un lugar destacado en su agenda de acción.

Pero es sabido que aquellas empresas que han mejorado sus capacidades digitales no sólo han podido sobrellevar la pandemia de forma mucho más relajada, sino que, además, cuentan con un camino mucho más despejado que aquellas que todavía no lo han hecho.

Así, algunas de las recomendaciones que se nos brindan en este informe para aquellas empresas que están en el camino de la transformación digital:

• Redescubrir su talento empresarial. La pandemia ha sido como un reinicio. Es una oportunidad para revisar los modelos comerciales y ver si la dirección está resultando eficaz.
• La transformación digital y la agilidad van de la mano. La tecnología y lo que puede ayudar a la empresa a pivotar de forma más rápida en sus operaciones.
• Permitir que la próxima generación desafíe las prioridades. Los miembros más jóvenes de las empresas son los impulsores de ver la tecnología como uno de los impulsores más importantes para el cambio del negocio.

Como segundo pilar, en este documento se recomienda tener como pilar profesionalizar la gobernanza de las empresas.

Las empresas familiares son complejas debido a las relaciones sobre las que se construyen, y son éstas las que permitirán que la compañía se adapte rápidamente o que sus decisiones se vean realentizadas y reprimidas. Es por ese motivo, que las empresas familiares, cada vez más optan por el apoyo profesional y moderación para abordar aquellos temas más delicados. Encontrar ese apoyo será el punto de inflexión para conseguir profesionalizar el negocio y ayudar a las familias a reconsiderar los roles, responsabilidades y composición del consejo y la dirección.

Y por último, incluir la sostenibilidad dentro de la estrategia de las empresas familiares.
Cumplir con las ESG repercute directamente en la reputación de la compañía, ya que tienen como objetivo dar prioridad al bienestar de sus empleados y de las comunidades en las que operan.
Es muy necesario para las empresas familiares aprender a medir y comunicar su agenda ESG.

Fuentes
(1) PWC