Puede que hayas tenido la idea de emprender, de crear tu propia empresa familiar, pero realmente no sepas cuáles son los pasos a llevar a cabo, cómo comenzar con tu proyecto empresarial, y cómo darle forma con el objetivo de crear un proyecto exitoso.
Debes saber que esto es lo más importante de todo el proyecto, ya que de ello depende tu futuro, el de tu familia y el de todos los profesionales que formarán parte de él.
Crear y mantener una empresa es una tarea difícil, pero aún lo es más si se trata de una empresa familiar. Sin embargo, trabajar con la familia puede tener muchas ventajas, como el apoyo mutuo y los lazos de protección, que pueden ayudar a que la compañía alcance sus objetivos. Además, permite tener una visión a largo plazo, ya que tus hijos u otros familiares pueden heredarla y continuar con el negocio
Todo proyecto empresarial parte de una idea, más o menos novedosa, que debe apoyarse en un plan de negocios que te servirá como hoja de ruta a seguir para lograr la consecución de tus objetivos.
Pero antes de elaborar ese plan, hay una serie de puntos claves que no debes dejar atrás y que facilitarán tu trabajo. Te reseñamos algunos:
Define tu proyecto
En un primer paso, debes definir detalladamente en qué consiste tu proyecto, desarrollar el modelo de negocio que vas a poner en marcha, cuáles son los recursos materiales y humanos que necesitarás para llevarlo a cabo, además del presupuesto y los tiempos con los que cuentas.
Este es el momento de estudiar el mercado en el que vas a moverte. Haz un estudio de la competencia, de tu público objetivo y de las necesidades de las personas.
Objetivos
Una vez que tengas todo el proyecto detallado, debes ser realista y elaborar una lista de objetivos para tu negocio.
Es muy importante que tus objetivos sean medibles y alcanzables, de forma que cuando lleguemos a la fase de control, sea mucho más fácil medir todo lo llevado a cabo.
Plan de actuación
Si ya tienes claros cuáles van a ser tus objetivos y los de tu negocio, llega el momento de planificar las acciones y estrategias que vas a llevar a cabo para conseguir los objetivos marcados.
Ve paso por paso, debes ser muy minucioso controlando los tiempos de realización, y los de respuesta del mercado a cada una de tus estrategias.
Ejecución
Es el momento de llevar a cabo todo lo que habías desarrollado en tu plan de negocio.
Mira con detenimiento y cambia tus estrategias cuando lo veas oportuno. Corrige los errores cometidos. La comunicación entre departamentos suele ser uno de los principales problemas al principio de todo negocio.
Control
En esta fase debes medir si todas tus estrategias se han llevado a cabo, y por consiguiente, se han alcanzado los objetivos que propusiste en tu plan. Puede que tengas que modificar algunos de ellos porque durante la ejecución te hayas dado cuenta de que son inalcanzables, o por el contrario, creas que son muy factibles y quieras conseguir metas más altas.
Además, debes comprobar cuáles han sido las incidencias o errores que más se han sucedido para poder evitarlos en un futuro. Incluso pueden que estén ocurriendo problemas que no tenías contemplados en tu plan de negocio y tengas que buscar solución a éstos.
Esta fase debe repetirse de forma periódica en tu negocio, ya que es la que te dirá si estás inmerso en un proyecto exitoso o no.
A las fases anteriores queremos aportarle una serie de consejos que no debes dejar de lado:
Lo primero que queremos recomendarte es que profesionalices la empresa creando las políticas, estructuras y sistemas correspondientes. Aunque se trate de un negocio familiar, es importante que la persona que lo cree tenga conocimientos suficientes en el sector que va a trabajar. Por supuesto, estos conocimientos deben ser transmitidos a los sucesores.
También es importante que definas bien los roles de cada uno de los integrantes. Es la clave para evitar conflictos internos, que en este tipo de empresas suelen ser más graves. Así, lo mejor es crear un comité directivo y determinar los roles y, sobre todo, quién es el líder. En este caso, la democracia te puede ser muy útil. Por supuesto, es esencial definir bien cuáles son las funciones principales y quiénes serán las personas que estarán a cargo de ellas.
Para evitar futuros problemas, especialmente en lo que se refiere a la sucesión, es esencial crear un protocolo familiar, que debe contener aspectos de regulación, sucesión de propietarios y temas administrativos. En este sentido, es importante que tengas en cuenta que este protocolo no se diferencia mucho del protocolo habitual de una empresa no familiar.
Para que la empresa familiar funcione, en caso de necesitar personal es recomendable buscar talento externo, es decir, personas que sean capaces de desenvolverse satisfactoriamente en el puesto en cuestión. Rodearse de buenos y talentosos profesionales es una de las claves del éxito para cualquier empresa, incluyendo la familiar.
Nuestro equipo de profesionales está habituado a tomar cada proyecto, se encuentre en la fase de su ciclo vital en la que se encuentre, estudiar cada detalle y trazar un plan de acción junto al equipo para que cada paso y decisión esté guiada por un sentido y con una estrategia consensuada. ¿Necesitas acompañamiento en tu proyecto empresarial? ¡Podemos ayudarte!
Fuentes:
(1) EAE Programas
(2) KPMG
(3) PWC