Descubre las claves para la sucesión en la empresa familiar
Todos somos humanos y anticiparnos a los problemas no se cuenta entre nuestras mayores habilidades.
Los datos nos lo dicen muy claramente: la supervivencia de las empresas familiares decrece de forma exponencial con el paso de las generaciones.
Los empresarios familiares son excelentes cuando se trata de ver oportunidades de negocio y de construir empresas rentables pero está claro que no se les da muy bien pasar el relevo a la siguiente generación.
La receta para conseguir una sucesión ordenada es muy sencilla y hasta diríamos que también es muy conocida: planificar la sucesión con antelación. Desafortunadamente esta receta no se aplica a menudo, un porcentaje demasiado grande de empresas familiares sigue desapareciendo durante el cambio generacional.
Vamos a indagar en el porqué de esta situación y en las causas de que esta receta tan sencilla no se aplique con efectividad.
Esta es la receta para una buena sucesión en la empresa familiar
No hay varitas mágicas, cada empresa y cada familia es un universo en sí mismo. Pero sí que hay tres conceptos que, bien aplicados, harán que la empresa familiar y por tanto la familia empresaria, perduren.
- Anticipación. Plantear el problema antes de que aparezca.
- Planificación. Una vez que reconocemos el problema, plantear su solución en un plan a largo plazo.
- Preparación. La siguiente generación ha de estar lista cuando le llegue el momento de tomar las riendas.
Esta es la receta muy resumida pero el riesgo de simplificar demasiado es que podemos perder la riqueza de los detalles, te hemos dado las claves principales ahora vamos a verlas con más calma.
Anticipación
Quizá sea la parte más complicada del proceso y eso que es simplemente una decisión, pero muy difícil de tomar y más difícil de prever, de darse cuenta que hay que tomarla.
El empresario familiar de primera generación es alguien que ha dedicado toda o la mayor parte de su vida a crear algo donde no había nada. Su empresa es su vida desde que se levanta hasta que se acuesta. Seguro que la sucesión le ronda la cabeza pero es muy difícil que llegue a la conclusión de que tiene que apartarse de su empresa por sí mismo.
Su entorno va a jugar un papel clave en esta decisión. Es necesario que la siguiente generación empiece a plantear la situación con la suficiente anticipación recordando algo importante: no se trata de sustituirle porque ya no sea válido sino de plantear cómo se va a hacer la sucesión cuando sea necesario acometerla.
Así evitaremos situaciones sobrevenidas que es el peor de los posibles escenarios. Plantear una sucesión con urgencias nunca es una buena idea.
Planificación
Vale, tenemos que plantear la sucesión, ¿cómo lo hacemos?
Llega el momento de planificar, hay que establecer unos objetivos, un calendario, prever los posibles obstáculos y cómo solucionarlos. Va a requerir unas cuantas conversaciones profundas y difíciles. Es muy posible que las emociones intervengan en alguna parte del proceso y lo pongan en peligro.
Cuando tengamos un plan llegará el momento de ir ejecutándolo, sin prisa pero sin pausa, asegurándonos en cada movimiento que damos que nos estamos dirigiendo con paso firme hacia nuestro objetivo y corrigiendo las desviaciones si se producen.
Es muy recomendable contar con ayuda externa en esta fase del proceso. Van a existir muchas situaciones y preguntas a las que la familia empresaria se va a enfrentar por primera vez y puede tener dudas a la hora de afrontarlas. Un asesor externo con experiencia en este tipo de situaciones puede ser de mucha ayuda.
Aquí te dejamos nuestro contacto. Sabemos que cada sucesión tiene su propia intrahistoria y te podemos ayudar a afrontarla de la manera correcta.
Preparación
El plan nos dirá aquellas acciones que hay que ir tomando, que indudablemente formarán parte de la preparación hacia una sucesión ordenada en tu empresa familiar.
Pero hay un tema importante al que hay que prestar la debida atención. La preparación del sucesor, tiene que estar listo desde varios puntos de vista: tiene que tener la motivación para hacerse cargo de la empresa, tiene que conocer en profundidad el negocio, el mercado y el entorno en el que se mueve.
Lo más importante es que el sucesor debe prepararse para ser el nuevo líder de la empresa familiar.
En una empresa familiar de primera generación el líder es el fundador, es el líder natural, el que toma todas las decisiones. Normalmente contrató a los empleados y les ha liderado por todas las vicisitudes que una empresa tiene que afrontar durante su historia. La familia le reconoce y respeta como líder.
El relevo generacional va a tener que asumir el rol de líder y no es sencillo. Una buena preparación en este aspecto va a ser clave. No solo durante el proceso de transición sino también en los años sucesivos.
El plan integral empresa-familia y el protocolo familiar
Hemos hablado de la anticipación, la planificación y la preparación. La familia empresaria va a tener que afrontar todos estos temas dentro del contexto en el que existen, no están aislados.
Ese contexto constituye un sistema compuesto por la empresa, la familia, el patrimonio y el entorno.
Para que una sucesión ocurra de manera controlada y exitosa estos cuatro factores, y sus interdepencias, necesitan estar controlados. Tenemos que plantearnos las preguntas adecuadas tomando todos los factores en cuenta.
Esas preguntas provocarán conversaciones interesantes, las que hay que tener para que tengamos todas las variables controladas. No podemos plantearnos una sucesión en una empresa familiar sin tener el cuenta el impacto en el patrimonio ni como el entorno en el que nos movemos puede afectar a los planes que estamos haciendo.
Un plan integral empresa-familia es el que nace de entender a la perfección el sistema en el que nos movemos, de esa comprensión nacen las preguntas que debemos hacernos y que, si están debidamente formuladas, nos llevarán a las respuestas que necesitamos.
Todo eso lo reflejaremos en un plan global que considera el sistema como un todo, que debemos ejecutar paso por paso y monitorizar para comprobar que cada paso que damos tiene el efecto deseado en nuestro sistema.
Y si no lo tiene, debemos tener las herramientas necesarias para corregir nuestro curso de acción.
No queremos cerrar esta sección sin hablar del protocolo familiar. Es una de las herramientas que se pueden usar como parte del plan integral empresa-familia pero no deja de ser solo eso, una herramienta que cubre las necesidades de una parte del proceso de sucesión. Es necesario en algunos casos pero no en todos.
La parte realmente vital es tener un plan integral empresa-familia que abarque todas las complejidades e interrelaciones del sistema empresa-familia-patrimonio-entorno.
Conclusión
La falta de una sucesión controlada es la principal causa de desaparición de la empresas familiares siendo los principales culpables no saber anticiparse al problema, una mala planificación y una deficiente preparación de la siguiente generación.
La clave para evitar esta situación es actuar antes de que sea tarde, trabajando con el fundador para que interiorice la necesidad de plantear su sucesión con la suficiente antelación y luego contar con asesoría experta para la planificación e implantación de las medidas necesarias.
Si tienes en cuenta estas claves estarás poniendo las bases para contribuir a evitar el drama de la desaparición traumática. Algo perfectamente posible si se actúa a tiempo. Esperamos haber contribuido a implantar esa necesidad de anticipación, planificación y preparación.
Si es así, estaremos contentos.