Lo único constante, es el cambio (Heráclito)
Las empresas familiares, en particular, se enfrentan el desafío de adaptarse a un entorno volátil y competitivo mientras preservan sus valores fundamentales.
La agilidad se ha convertido en una habilidad crítica para poder sobrevivir y prosperar en este panorama dinámico.
El Consejo de Administración en la estructura organizativa de la Empresa Familiar
Introducir un consejo en una empresa familiar implica un cambio significativo que afecta decisiones, intervinientes y distribución de la autoridad.
Su papel es crucial porque puede llegar a actuar como contrapeso para el equipo directivo, protegiendo no solo los intereses de los accionistas mediante una estricta monitorización, si no que también ofrece la búsqueda de la viabilidad a largo plazo de la empresa.
Sin embargo, muchas veces, los lazos familiares son un obstáculo y estos consejos pueden quedarse atrapados en estructuras y procesos rígidos, lo que dificulta su capacidad para anticiparse y responder ágilmente a los cambios del mercado.
Consejos de Administración más ágiles y flexibles
Primero, es fundamental reconocer la necesidad de adoptar una mentalidad ágil en todos los niveles de la organización, incluido el Consejo de Administración. Esto implica fomentar una cultura de apertura al cambio y la experimentación, donde se valoren la adaptabilidad y la resiliencia tanto cuanto la estabilidad y la tradición.
Es interesante adoptar métodos de planificación estratégica, que se ajuste continuamente para dar respuesta a las condiciones cambiantes del mercado. Además, es importante introducir la diversidad a través de la incorporación de nuevos miembros externos con experiencia en sectores diversos y perspectivas frescas.
La transparencia y la comunicación abierta son pilares fundamentales de la agilidad organizacional.
Los líderes de empresas familiares deben facilitar un diálogo continuo entre los miembros del consejo, fomentando una mayor capacidad de escucha y colaboración para encontrar juntos soluciones innovadoras.
Por último, pero no menos importante, es crucial que los líderes de empresas familiares estén dispuestos a desafiar el statu quo y a abrazar el cambio. Esto puede implicar abandonar prácticas obsoletas o tradicionales que ya no son efectivas en el mundo empresarial actual, y estar abiertos a nuevas ideas y enfoques disruptivos.
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Fuente: (1) Equipo y Talento (2) McKynsey.com Imagen: Freepik